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UN HOTEL HECHO POESÍA QUE OTEA EL ATLÁNTICO: VILA GALÉ COLLECTION PALÁCIO DOS ARCOS

La nueva oda al Atlántico: el Palácio dos Arcos amplía su encanto con 12 habitaciones más con vistas al mar”

 

 

Hay lugares que, más allá de la mera estancia, invitan a un diálogo con la historia, con el arte y, en este caso, con el mar. El Vila Galé Collection Palácio dos Arcos, en la serena localidad portuguesa de Paço de Arcos, es uno de esos enclaves donde el tiempo parece detenerse para dar paso a la belleza. Este palacio, que se levanta sobre la ribera del Tajo, ha sabido conjugar su legado histórico con la sensibilidad de un hotel dedicado a la poesía, y ahora, amplía su oferta con una nueva estrofa.

El hotel, que ya era un referente de elegancia, ha incorporado una docena de habitaciones más, todas ellas con vistas al mar. Con esta ampliación, que eleva el total a 88 habitaciones, el Palácio dos Arcos responde a una creciente demanda, integrando estas nuevas estancias en la estructura existente sin alterar su esencia. La decoración sobria de las habitaciones potencia su mayor atractivo: una panorámica sin igual del Atlántico, un horizonte que se extiende hasta el infinito y que se funde con el cielo.

Un viaje a través de los siglos y la lírica

El encanto del Vila Galé Collection Palácio dos Arcos reside en su capacidad para transportar al huésped a otra época. La historia cuenta que, desde los balcones de este palacio, reedificado tras el siglo XV, el rey Manuel I presenció la partida de las carabelas portuguesas rumbo a la India. A lo largo de los siglos, el lugar se convirtió en un punto de encuentro de la realeza, que acudía para asistir a las regatas en el río.

Inaugurado en 2013 como el primer hotel de cinco estrellas del grupo Vila Galé en Portugal, esta joya arquitectónica rinde homenaje a la poesía. Los pasillos y las habitaciones se convierten en un lienzo donde las palabras de grandes autores como Fernando Pessoa, Vinícius de Moraes y Florbela Espanca cobran vida. Pasear por sus estancias es «cruzarse» con sus versos, una experiencia que fusiona el confort moderno con la tradición de un palacio centenario.

Las 88 habitaciones del hotel, con sus balcones que se abren al mar, invitan al sosiego. Son espacios perfectos para disfrutar de un momento de lectura, sumergirse en la atmósfera lírica del lugar o simplemente dejarse llevar por la brisa marina.

Más allá de las habitaciones, la experiencia se completa con una cuidadosa selección de servicios. El spa Satsanga Collection ofrece un refugio de tranquilidad con piscina cubierta, sauna, baño turco y una amplia gama de tratamientos. El restaurante «Inevitável», por su parte, deleita los sentidos con una cocina portuguesa reinventada por el chef ejecutivo Francisco Ferreira, siempre con el Tajo como telón de fondo. Otros rincones dignos de mención son la biblioteca, la tienda de vinos y la capilla con su altar barroco.

Rodeado de jardines con árboles centenarios y una piscina exterior que invita al baño, este hotel boutique ofrece un ambiente de exclusividad. Situado en el corazón de Paço de Arcos y a solo 15 minutos en coche de los centros históricos de Lisboa y Cascais, su proximidad a la estación de tren permite un viaje único a lo largo de la costa, una oportunidad para disfrutar del paisaje sin prisas. El Vila Galé Collection Palácio dos Arcos no es solo un hotel; es un poema en sí mismo, un lugar donde el lujo y la historia se entrelazan.

 

 

 

 

 

 

Más información: www.vilagale.com

LA FUENTE MILAGROSA DE CEE

Un rincón profundamente espiritual donde las aguas curativas y el silencio del entorno cautivan a peregrinos y viajeros por igual.

 

En el corazón de la parroquia de Pereiriña, se encuentra una capilla que custodia un secreto. En su modesta fuente de piedra, peregrinos y viajeros se refrescan tras largas horas andando sin conocer previamente el poder de estas aguas. Entre historias de sanaciones y momentos de descanso, la Fuente Milagrosa se ha convertido en un punto donde la fe y la naturaleza se abrazan.

Entre senderos y prados verdes se esconde la pequeña Capilla de San Pedro Mártir. Este rincón del siglo XVI, de planta rectangular, fachada sobria y sencilla espadaña, se alza como guardiana de un tesoro único: una fuente que desde tiempos inmemoriales es símbolo de fe para muchos y de salud para otros.

El agua que brota de su caño ha sido buscada por generaciones para sanar dolencias, especialmente de la piel y los ojos, y aún hoy son muchos los que se lavan o beben estas aguas con la esperanza de recibir la gracia sanadora.

Este rincón adquiere un significado especial para los peregrinos que, tras culminar el Camino de Santiago, deciden continuar hasta Finisterra. La fuente milagrosa y su visita a la Capilla de San Pedro Mártir marcan un necesario alto en el camino antes de proseguir hacia el océano.

La tradición se mantiene viva gracias a la romería que cada año congrega a vecinos y visitantes en el monte de Lobelos, el domingo siguiente al día de la Ascensión.

En este enclave privilegiado, parada obligatoria para peregrinos y viajeros, la Fuente Milagrosa de Cee, es un lugar donde la historia, la fe y la naturaleza se entrelazan para ofrecer al caminante una experiencia única. Entre leyendas de sanación, el paso silencioso de peregrinos y la belleza propia de la Costa da Morte, este manantial sigue siendo un símbolo inalterable en el tiempo.

 

 

 

 

Para más información:https://www.turismodecee.es/es/

EL MUSEO ARQUEOLÓGICO E HISTÓRICO DE BAENA. UNA CITA CON LA HISTORIA

Resérvate tiempo para desvelar los secretos de un lugar que respira historia y arte. Un emplazamiento donde el pasado se conjuga con el presente de una manera tan elegante como sorprendente.

 

 

Este templo de la cultura se erige en un edificio que es, en sí mismo, una joya arquitectónica: la imponente Casa de la Tercia. Construida entre 1792 y 1795, nació con un propósito muy distinto al actual: ser almacén de grano, semillas y bodega de aceite, un lugar donde la Corona recaudaba su parte de los diezmos eclesiásticos. ¡Imaginemos el ajetreo de antaño en sus vastas estancias!

Tras la Desamortización de Mendizábal en 1841, el edificio vio desaparecer su uso inicial y abrazó nuevos destinos. De posada a comienzos del siglo XX, a cárcel durante la Guerra Civil entre 1936 y 1939. ¡Cuántas historias habrán presenciado sus muros! Desde 1960, el Ayuntamiento de Baena fue su inquilino hasta que, en 1984, lo incorporó a su patrimonio, sometiéndolo a una importante reforma.

Pero fue en 1999 cuando este emblemático edificio, ubicado en la C/ Santo Domingo de Henares, 5, abrió sus puertas como museo, inaugurándose oficialmente en su primera planta. En el año 2000 se acordó su creación e inscripción en el Registro de Museos de Andalucía, consolidando su relevancia cultural. Una importante rehabilitación en 2010 lo convirtió en la magnífica sede que es hoy, siendo reinaugurado en febrero de 2011.

Adentrarse en el Museo Histórico de Baena es emprender un viaje fascinante a través del tiempo. Su discurso expositivo, organizado cronológicamente desde la Prehistoria hasta la época contemporánea, nos lleva de la mano por doce salas repletas de tesoros.

Entre sus fondos, destacan colecciones arqueológicas procedentes, en su mayoría, de las excavaciones del Parque Arqueológico de Torreparedones. ¡Prestad atención al conjunto votivo del santuario y a las imponentes esculturas romanas del foro!

Pero hay tres colecciones que brillan con luz propia, auténticos imanes para los amantes de la historia. La primera, el conjunto votivo ibero-romano del santuario meridional de Torreparedones, con sus numerosos exvotos de piedra que representan figuras antropomorfas y anatómicas. La segunda, la exquisita colección de numismática ibero-romana, con monedas de un sinfín de cecas, familias republicanas y emperadores, desde Julio César hasta Teodosio. Y, por último, la majestuosa colección de estatuaria romana de gran formato, con togados de Iponoba y Torreparedones, y esas monumentales esculturas sedentes de Augusto, Calígula/Claudio y Livia que nos trasladan directamente al esplendor del Imperio.

La sala IV nos sumerge en la vida cotidiana y funeraria romana, con piezas cerámicas y metálicas de cocina, vidrio, plomo y pequeños objetos de bronce, entre los que se atreven a mostrarse amuletos fálicos y apliques de sítulas. Del mundo funerario, copias de las urnas del «Mausoleo de los Pompeyos» de Torreparedones y lápidas nos invitan a reflexionar sobre la existencia. Y del mundo visigodo, dos piezas con inscripciones y motivos cristianos, un anillo de oro y un cazo de bronce con el crismón y los nombres de Sabina y Nico, evidencian el arraigo de la religión en la zona.

Para cerrar este recorrido, en la sala XII nos aguarda un facsímil del Cancionero de Baena, cuyo original reside en la Biblioteca Nacional de París. Un detalle que enlaza la historia local con el legado universal.

La Casa de la Tercia es mucho más que el continente del museo. Es uno de los edificios civiles más relevantes de Baena, un emblema arquitectónico de la provincia. Su fachada principal, con sus simétricos vanos protegidos por rejas, se alza sobre un zócalo de piedra y nos engaña con un trampantojo que imita sillares almohadillados. En el centro, una portada barroca con frontón partido nos invita a entrar.

El horario de visitas es de 10:00 a 14:00 de martes a domingo y festivos, y de 17:00 a 19:00 los jueves, viernes y sábados.

 

 

Más información enhttps://baenaturismo.com/

www.baena.es

¿TE ANIMAS A DESCUBRIR FORMENTERA EN OTOÑO?

 

 

La Formentera que te espera en otoño es, sin duda, la más auténtica. Esa que se revela cuando el ritmo frenético del verano da paso a la serenidad de sus días, al color ocre de su luz, y a una agenda repleta de planes pensados para el viajero que busca algo más que sol y playa. «Descobreix Formentera a la tardor 2025» no es solo una campaña de descuentos; es una invitación a redescubrir la isla a través de una mirada más pausada y personal.

 

Un septiembre y octubre únicos

La campaña, que abarca los meses de septiembre y octubre, ofrece una oportunidad ideal para aquellos que anhelan la calma y la esencia de la menor de las Pitiusas. Es el momento perfecto para pasear por sus senderos, sentir la arena de sus playas con ese inconfundible azul de sus aguas y disfrutar de cada rincón sin prisas, con la complicidad de una temperatura aún cálida y agradable.

Formentera en otoño despliega una nutrida agenda cultural y deportiva que atrae a un público diferente y curioso. El Día Internacional del Turista se celebra con actividades especiales, mientras que la música y el arte se dan cita en eventos como el festival «Formentera Sona» y la exposición «Tardor d’Art». Las fiestas del Pilar de La Mola, los días 11 y 12 de octubre son otro imprescindible para quienes quieren visitar Formentera. Para los amantes de la astronomía, las noches de observación lunar y estelar de «Formentera mira al cel» prometen un espectáculo memorable. Desde luego no puede faltar el yoga, ya que la isla es un lugar excelente para su práctica. Por eso, son varios los retiros de yoga que se dan durante estas fechas de calma.

Los deportistas encontrarán en la isla su paraíso personal. Desde la Regata XLII Vuelta a Formentera en Windsurf hasta el Triatlón Illa de Formentera, pasando por las emocionantes carreras 15k Formentera Sunset Run y la Pujada a la Mola, la adrenalina está garantizada. Además, las Semanas Gastronómicas son una cita ineludible para quienes quieren saborear la isla a través de sus productos y recetas locales.

La isla que se te abre de par en par

Para facilitar esta experiencia, distintas empresas colaboran en esta campaña, ofreciendo beneficios especiales para quienes decidan pasar sus días en la isla en esta época. Es una forma inteligente de incentivar la visita en temporada baja, permitiendo al viajero disfrutar de Formentera con una mayor tranquilidad y por mucho más tiempo.

Navieras, empresas de alquiler de vehículos, alojamientos y negocios de actividades turísticas se han unido para hacer la visita aún más atractiva. La idea es sencilla: si pernoctas en la isla, accedes a una serie de ventajas que hacen que la experiencia sea completa y fluida. Es un gesto de bienvenida que subraya el carácter acogedor y auténtico de la isla fuera de los meses de máxima afluencia.

En definitiva, Formentera en otoño se revela como un lienzo lleno de matices, una escapada que fusiona naturaleza, deporte, cultura y gastronomía en una atmósfera relajada y genuina. Es el momento perfecto para descubrir esa Formentera de postal, pero en versión privada y exclusiva, sin filtros ni aglomeraciones.

 

 

Más información: www.formentera.es

 

UN OTOÑO DE ENSUEÑO EN UNA CIUDAD MEDIEVAL

Una almendra milenaria, una catedral que inspiró al mismísimo Ken Follett y una gastronomía que conquista los paladares más exigentes.

 

Vitoria-Gasteiz es un destino para disfrutar en cada estación del año, pero la llegada del otoño lo transforma por completo. La caída de las hojas convierte sus calles empedradas en un lienzo perfecto para ser fotografiado. El aroma de sus bares invita al viajero a saborear la tradición en pequeños bocados maridados con vinos de la zona. La naturaleza que la rodea ofrece un contraste idílico, y para cerrar la jornada, el Gran Hotel Lakua se presenta como el único alojamiento de cinco estrellas de la ciudad.

 

Un paseo por el Casco Medieval es una visita obligada. Insignia de la ciudad por su alto grado de conservación, sus calles empedradas, museos y la historia viva que se respira en cada rincón hacen que esta experiencia sea inolvidable.

Pero Vitoria no solo es patrimonio, también es naturaleza en estado puro. Su Anillo Verde, un conjunto de parques, humedales y bosques que rodea la ciudad, ofrece rutas a pie o en bicicleta perfectas para disfrutar del otoño sin límites. El silencio solo se rompe con el canto de las aves que habitan en sus lagunas.

Además, Vitoria es una ciudad que se saborea. Una ruta por sus bares es un homenaje a la cocina tradicional vasca, donde cada parada se convierte en una recreación para los sentidos. Pintxos y guisos de temporada no solo alimentan el estómago, sino también el alma.

Un descanso de lujo en el Gran Hotel Lakua

Para quienes buscan un descanso de verdad, a pocos minutos del centro histórico encontrarán el Gran Hotel Lakua. Único con cinco estrellas en toda la ciudad, es el lugar perfecto para relajarse en un entorno acogedor y elegante.

Sus amplias habitaciones, su reconocida oferta gastronómica basada en productos de gran calidad y su distinguido spa urbano hacen de este hotel el complemento perfecto para una jornada intensa en la ciudad.

Vitoria en otoño es historia, naturaleza, sabor y calma. Es un destino para quienes buscan experiencias auténticas, lejos de las prisas y cerca de lo esencial.

 

Para más información:www.granhotelakua.com

UN VIAJE A TRAVÉS DEL TIEMPO EN PIEDRA Y MEMORIA POR LA CÁRCEL REAL DE CORIA

Descubre un edificio fascinante que atestigua el pasado carcelario de la localidad cauriense…

 

En el corazón de la venerable Ciudad de Coria, donde el eco de los siglos resuena en cada adoquín, se alza un edificio que, a pesar de su sobria apariencia, encierra en sus muros una parte fundamental de la historia local: la Cárcel Real. Lo que hoy se presenta como un espacio cultural vibrante, fue en su momento un severo recordatorio de la justicia y la vida penitenciaria, un testimonio palpable de la evolución de la administración civil en Castilla.

De Reales Decretos a Recias Paredes: La Gesta de una Prisión

 

La edificación actual, que data de finales del siglo XVII, no es sino la última encarnación de una serie de prisiones que se sucedieron en este mismo emplazamiento. Los Reyes Católicos, visionarios en su afán por consolidar el poder central, dictaminaron a principios del siglo XVI la obligatoriedad de erigir Casas Concejos y Cárceles propias en todas las villas relevantes del reino de Castilla. Esta disposición real marcó el inicio de una necesidad que, con el tiempo, se tradujo en la construcción de edificios robustos y funcionales.

Así, ante el estado ruinoso e inadecuado de la primitiva edificación, se acometió, en 1686, la construcción de la Cárcel Real que hoy contemplamos. Ubicada estratégicamente al final de la calle Monjas, frente al histórico «Ayuntamiento Viejo», esta obra civil de estilo barroco fue fruto del ingenio del arquitecto Alonso Hernández de Garrovillas, financiada con los fondos de la Ciudad y su Partido. Una inscripción labrada en piedra, sobre su imponente puerta adintelada de granito, atestigua la fecha y los artífices de esta singular edificación.

Anatomía de la Privación: Espacios que Narran un Pasado

 

La fábrica, erigida con maestría en ladrillo y rematada con sillería en esquinazos, vanos y alero, presenta una planta rectangular distribuida en dos pisos, revelando la severa organización de la vida carcelaria de antaño. En la planta baja, se ubicaban el zaguán de entrada, la sala de audiencias y la de carceleros, junto a dos celdas fuertes: una destinada a los reos comunes y otras dos, de castigo, una de ellas incluso soterrada, vestigio de las penitenciarías de los siglos XV y XVI.

Ascendiendo a la planta alta, se hallaban la sala del alcaide, la cocina, dos celdas fuertes más, una celda noble –posiblemente para presos de mayor alcurnia– y otra destinada a comunes. Una distribución que ilustra la dura realidad de la privación de libertad en la época, un sistema que, sorprende, se mantuvo operativo como penitenciaría hasta bien entrado el siglo XX, concretamente hasta 1981.

Renacer en el Presente: Un Museo para la Historia de Coria

 

Tras su clausura como prisión, la Cárcel Real de Coria ha experimentado una transformación ejemplar. Desde 1999, sus remozados calabozos y estancias, conservadas tal cual se concibieron, albergan el Museo de Historia, Arqueología y Etnografía de la Ciudad de Coria. Este museo se erige como un custodio invaluable del patrimonio cauriense, ofreciendo una exposición permanente en su planta baja.

Aquí, el visitante puede sumergirse en un viaje cronológico que abarca desde la prehistoria hasta la época medieval, a través de una importante colección arqueológica. Destacan, por su valor y singularidad, sus útiles prehistóricos, el verraco de origen celta vetón como símbolo de los primigenios fundadores de esta urbe, sus colecciones de epigrafía romana junto a una magnífica escultura en mármol, estelas funerarias y, por supuesto, el inestimable Fuero de Coria, documento capital para comprender la organización jurídica y social de la ciudad en tiempos pasados.

La planta superior del museo se dedica la exposición permanente que rinde homenaje a las célebres Fiestas de San Juan, permitiendo al visitante sumergirse en la vibrante tradición taurina festiva cauriense.

La Cárcel Real de Coria, antaño símbolo de reclusión, se ha convertido hoy en un faro cultural, un espacio donde la historia cobra vida y se ofrece al público con la dignidad que merece. ¿Está usted preparado para desentrañar sus secretos?

Más información:
https://turismocoria.es/turismo/