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CINCO MONUMENTOS CON ACTIVIDADES PARA VERANO

Este verano no os podéis perder ninguna de las actividades que los castillos de la Red de Patrimonio Histórico de España han planeado para todos los públicos.

 

El calor no puede ser una excusa para disfrutar de la magia de los Castillos y Palacios de la geografía española. Por ello, los monumentos pertenecientes a la Red han preparado un amplio programa de actividades que os descubrirán la riqueza patrimonial y cultural de una forma diferente. No dejéis pasar la oportunidad de hacer yoga en un conjunto patrimonial, o hacer una visita teatralizada nocturna…

 

 

EL ROMERAL

El Conjunto Patrimonial El Romeral, en Toledo, os brinda la oportunidad de disfrutar, hasta el 15 de agosto, de una visita guiada que comenzará en el Museo de la Cultura del Esparto, declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Parte de este museo se localiza en el interior de una vivienda típica de esta zona manchega excavada en la tierra. A continuación, visitaréis la Crestería manchega, formada por cuatro molinos de viento, entre los que se encuentra el Molino de Viento Cervantino.

El recorrido continuará por el Museo etnográfico, ubicado en una vivienda subterránea, en la que descubriréis escenas y utensilios de la vida cotidiana de antaño. Para finalizar la visita os desplazaréis a los Campos de Lavanda de El Romeral, en los que podréis recolectar las flores y conocer el ciclo de la lavanda hasta sus derivados finales. Esta visita tendrá una duración de 3 horas.

En este mismo escenario, los días 29 y 30 de junio se celebrará el IV Concurso de Arte Urbano ‘Patio de La Mancha’ organizado por El Romeral Vivo y Mariano Montalvo. Este concurso de grafitis llenará el pueblo de murales con la temática “enramos”, una antigua tradición en la que los mozos el 28 de junio recorrían las calles de la localidad pintando flores, en las fachadas de las mozas aún solteras. Un plan alternativo para conocer El Romeral en todo su esplendor.

 

 

MONASTERIO DE GUISANDO

El Antiguo Monasterio de San Jerónimo de Guisando, Ávila, celebrará el próximo 22 de junio un concierto de viento a la luz de la luna llena. ‘Cinco vientos, madera y cuatro toros’ es una oportunidad única para disfrutar del sonido de la flauta travesera, el clarinete, el oboe, el fagot y la trompa a cargo de Arezzo Ensemble.

Un recorrido por los momentos más representativos de la música escrita, con un extenso programa pensado por y para el disfrute del público. Un instante apasionante para redescubrir las partituras, con la sonoridad y expresividad que solo un quinteto de viento puede aportar. Este recital tendrá una duración de 1 hora y media, con 15 minutos de intermedio.

 

 

FORTALEZA DE LA MOTA

En esta impresionante Atalaya natural rodeada de un mar de olivos se encuentra la Fortaleza de la Mota, en Alcalá la Real, Jaén. El escenario perfecto para celebrar el Día internacional del Yoga, el 16 de junio con una masterclass que comenzará a las 19:30, y será totalmente gratuita.

 

 

CASTILLO DE LÁCHAR

El castillo de Láchar, en la vega de Granada, tiene un amplio programa de actividades que comenzarán el 28 de junio con una visita guiada y un espectáculo de magia ‘Momentos mágicos’. Aprovecha la oportunidad de conocer este monumento con una visita especial a las 19:00, y a continuación déjate sorprender con la magia del espectáculo que brindará el ilusionista Dani Danielo a las 21:00.

El 29 de junio, 27 y 28 septiembre, a las 22:00 h tendrá lugar una visita guiada teatralizada nocturna en la que conoceréis a diferentes personajes históricos, de la mano del propio Duque San Pedro de Galatino. La visita se llevará a cabo en los jardines e interiores del castillo, y tendrá una duración de 1 hora y media.

 

 

CASTILLO DEL BAILÍO

El Castillo del Bailío o del compromiso situado en el promontorio de la “La Peñaza”, en Zaragoza, fue la primera fortificación que se construyó durante el siglo X por los musulmanes. Este monumento ha preparado tres actividades gratuitas que no dejarán indiferente a nadie. “Un viaje al cosmos”, el viernes 28 de junio, desde la terraza del castillo a las 23:15, y las 00:15, para conocer la importancia del firmamento. “Caspe y el reino de Aragón”, los días 28 de junio a las 19:30, y 29 y 30 de junio a las 10:30 y 19:30. En ella recorreréis las calles de la localidad y conoceréis la historia del reino y la corona de Aragón. En Visita al Castillo del Compromiso, los días 29 y 30 de junio, a las 12:00 y 18:30, con motivo de la conmemoración del compromiso de Caspe, los visitantes podrán conocer el devenir histórico del castillo en la sala donde se realizó dicho compromiso.

 

Desde la Red de Patrimonio Histórico de España (REPAHIS), os invitamos a descubrir los monumentos más emblemáticos en torno a las propuestas que los monumentos generan y os presentamos una nueva dimensión de Turismo Cultural y Experiencial. Un proyecto financiado por el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, NextGenerationEU y el Ministerio de Industria y Turismo – Gobierno de España.

 

 

Más información: www.castillosypalacios.es

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DISFRUTA DEL ÚLTIMO PASEO PRIMAVERAL POR FORMENTERA

 

 

 

Formentera es un paraíso, si, ¡pero un paraíso floral! Eclipsado por sus playas y calas de aguas cristalinas (su más evidente reclamo veraniego) la menor de las Pitiusas es también un Edén por descubrir. Porque, más allá de su salvaje belleza, la isla atesora una variadísima flora autóctona arropada en una diversidad de zonas que combinan sus atractivos paisajes con la observación de especies únicas. Aunque ahora van apeteciendo los chapuzones, pasear por ella permite al visitante admirar sabinas retorcidas por el viento o bosques de pinos pero también enebros, romeros, brezos, tomillos, amapolas, margaritas, gladiolos, campanillas de las dunas, azucenas de mar, limoniums, eneas, carrizos … ¡e incluso delicadas y románticas orquídeas!
Porque Formentera… también es bella en primavera.

 

La naturaleza de Formentera se presenta de manera tan austera como privilegiada. Con la precipitación media más escasa de Baleares, la vegetación de la menor de las Pitiusas es capaz de mostrarse ante el visitante con todo su esplendor. Y de manera muy especial en primavera cuando estas joyas naturales han empezado a brotar como por arte de magia.

 

Adentrarse en los bosques de Formentera, dominados por sabinas y pinos, es también descubrir otros estratos herbáceos dignos de admirar. En lugares donde las condiciones del suelo permiten mayor densidad y desarrollo, aparecen las máquias (arbustos de altura entre 50 cm y 4 metros) e incluso especies como el madroño. En los de menor densidad hay mayor diversidad de especies, como el romero, el brezo, las jaras o los aromáticos tomillos. La presencia de encinas es testimonial. La Mola y Cap de Barbaria son las zonas donde los hábitats forestales se encuentran mejor representados. Estos ecosistemas forestales son esenciales tanto para retener el agua de las lluvias como para servir de refugio a la fauna silvestre.

 

Mención aparte merecen las orquídeas. Alcanzan una gran extensión y, por su importancia y fragilidad, están catalogadas como Hábitat de Interés Comunitario Prioritario por la Directiva de Hábitats. En Formentera existen 17 especies autóctonas. Crecen solo en suelos inalterados y bajo condiciones muy particulares. Y son conocidas por sus estrategias de polinización, basadas en el ‘engaño’ a determinados insectos.

 

Parte importante del suelo de Formentera está dedicado a la agricultura, con la higuera (símbolo de la isla) y la vid como cultivos más extendidos. También pueden verse almendros, algarrobos y olivos. Una interminable lista de plantas de preciosa floración primaveral llenan de aromas y colores los paisajes agrícolas y caminos interiores: amapolas, caléndulas, margaritas, gladiolos… También muchas plantas silvestres que crecen en la isla han sido utilizadas tradicionalmente por sus propiedades medicinales o culinarias. Como el ‘tomillo cabezudo’ (para elaborar licor de hierbas), las ‘collejas’ (verdura que es ingrediente principal de un plato autóctono, el cuinat, típico de Semana Santa) o el ‘hipérico’ (con el que se elaboraba un aceite de importantes propiedades curativas y cicatrizantes).

 

Las playas de Formentera acogen algunos de los sistemas dunares mejor conservados de las Baleares, como en Ses Illetes, Cavall d’en Borràs, Levante, Migjorn o s’Alga (en la isla de s’Espalmador). Incluyen una parte sumergida –los arrecifes que se forman por las praderas de Posidonia oceánica– y una parte emergida, las plantas que crecen sobre las dunas, con sus raíces profundas, retienen el sustrato arenoso y fijan estas dunas. Ellas albergan diversas comunidades de plantas, como la ‘rubia marina’, el ‘rábano de mar’, la ‘campanilla de las dunas’ o la ‘azucena de mar’. Y sobre las más alejadas del mar se asientan las sabinas.

 

Los saladares son un hábitat de gran singularidad donde crecen especies únicas. En Formentera se ubican en las inmediaciones de las salinas (estany Pudent, estany des Peix o las salinas Ferrer y Marroig) y en la pequeña laguna de s’Espalmador. Aquí aparecen diversas especies endémicas, como ‘Limonium formenterae’, ‘Limonium wiedmanni’ o ‘Limonium gosii’. Y en el Camí des Brolls, además de su Ruta Ornitológica hay algunas zonas de vegetación ligada al agua dulce, como eneas o carrizos.

 

Casi un 30% de las plantas catalogadas pertenecen a las comunidades litorales. Los tramos rocosos de primera línea de costa presentan vegetación más empobrecida. La más extendida es la ‘Limonium minutum’, exclusiva de Balerares, y el ‘Limonium cassonianum’ presenta flores blancas. Acompañando a estas especies suele estar el ‘hinojo marino’. Una buena representación de los hábitats litorales está en pequeños islotes como s’Espalmador o es Freus.

 

Los acantilados de la Mola y Cap de Barbaria custodian especies vegetales de gran valor naturalístico, como el ‘palmito’, única palmera autóctona de este territorio, en zonas inaccesibles de punta de sa Creu. La Mola es rica en endemismos, como la ‘Saxifraga corsica subsp. cossoniana’, diminuta planta de flores blancas. Pero es precisamente el endemismo el que genera encanto por su rareza. En Formentera hay más de una veintena de plantas endémicas.

 

¡Disfruta de el último paseo primaveral para descubrir una Formentera que no conocías!

 

Más información: www.formentera.es

¡UNA RÍA DE FIESTAS Y FERIAS PARA NO DEJAR INDIFERENTE A NADIE ESTE VERANO!

Ría da Estrela propone un sinfín de propuestas y planes únicos para descubrir este rincón de Galicia desde una perspectiva más lúdica y distendida. Pequeños y grandes tienen cabida en este carrusel…

 

 

Historia, patrimonio cultural y natural, una gastronomía de impresión… ¡Y fiestas! En la Ría da Estrela los veranos están marcados por una agenda de eventos pensados para todo tipo de públicos. Desde las fiestas patronales y romerías de toda la vida, pasando por ferias medievales singulares, los conciertos de jazz o arpa, algunos más cañeros y fiestas horteras… Sí, has leído bien, ¡HORTERAS! El lado más festivo de la Ría se descubre este verano. Hay para todo el mundo, así que nadie se escaqueé.

 

Medievales, celtas, náuticas o religiosas, nunca pueden faltar las ferias.

Tras la gran aceptación de la primera edición, este año se repite la ‘Feira Náutica do Freixo’, en Outes. Los próximos 28, 29 y 30 de junio, el evento gira en torno a dos objetivos principales: una parte profesional dirigida principalmente a la visibilidad, la promoción y el volumen de negocios de los profesionales y las empresas vinculadas al sector; y una parte divulgativa, dirigida a dar a conocer y promocionar el sector.

Por su parte, Muros celebra la XIX de las Jornadas de cultura mariñeira ‘Muros mira ao mar’, del 5 al 7 de julio. Son unos días perfectos para difundir entre todos los vecinos y visitantes la socialización y puesta en valor del patrimonio material e inmaterial de la cultura del mar. Tres jornadas de  charlas, concursos, visitas guiadas, pasacalles, obras de teatro, talleres infantiles, un mercado mariñeiro, degustaciones gastronómicas, obradoiros y exposiciones.

Hoy en día casi todos los pueblos tienen feria medieval, pero es que lo de Noia es otro nivel. Este año celebra el 25 aniversario de la ‘Feira Medieval’, del 12 al 14 de julio, y lo hará con tres días de música y diversión, a cargo de juglares, bufones y malabaristas. Tampoco faltarán las actividades destinadas al disfrute de público de todas las edades; torneos y luchas de caballeros, desfiles, pasacalles musicales y teatrales, talleres en vivo, una zona infantil para los más pequeños…

Acabando julio, es momento de viajar aún más atrás en el tiempo para sumergirse en el periodo celta. Porto do Son celebra su ‘Feira Celta’, una oportunidad única de presenciar exhibiciones de luchas y combates; de tomar algo en las tabernas; disfrutar la animación musical y con los personajes mitológicos.

Y ya por septiembre, la mejor forma de despedir el verano es hacerlo en Tállara, Lousame, con las Fiestas de San Roquiño. ¿Una curiosidad? Probad a ir esos días a comer allí. Si sois amantes del cordero, estáis de suerte, ya que todo el mundo, restaurantes y bares incluidos, hacen cordero esos días. Un cordero sensacional, con unas patatitas doradas, unos pimientitos, un buen vino… ¡Insuperable!

El último fin de semana de septiembre es de obligada visita la Romería de San Campio en Ourente, Outes. Cientos de romeros, atraídos por el poder que se le otorga al santo de curar el ‘mal cativo’, es decir, los problemas relacionados con la cabeza, hasta el punto de que las zonas de aparcamiento habilitadas por la organización de los festejos resultan escasas y los coches toman las márgenes de pistas y caminos.  Pero no todo es rezar, ¿eh? También hay música, gastronomía y animación para los sanados por el santo… y para los que no, también.

Fiestas estrafalarias para gente poco corriente.

Si hay una fiesta que enorgullece a los habitantes de la Ría, son sus Carrilanas de Esteiro, en Muros. Están declaradas fiestas de interés turístico Nacional y este año se celebran del 19 al 21 de julio. Decenas de coches fabricados a mano y movidos por la propia inercia bajarán a toda velocidad por una cuesta de 2,5 km para deleite de los asistentes, que podrán disfrutar de la originalidad de los ‘ingenieros’ de tan curiosos artefactos.

Desde hace 22 años, en Porto do Son se rinde homenaje a lo ‘hortera’, así sin medias tintas. Carreras de tacones, concurso de playback, conciertos y pasacalles donde todo el mundo puede sacar sus peores galas y vestirse de ‘mamarracho’ para reírse a carcajadas de uno mismo, algo muy necesario en estos tiempos. La Festa Hortera, a principios de agosto, es una oda a lo bizarro, con grandes e imprescindibles dosis de humor para que grandes y pequeños disfruten de un fin de semana gamberro.

En Noia, cada mes de agosto se celebra ‘Ponte un Sancosmeiro’. Es un precioso sombrero artesanal, emblema de la ciudad. Este año, el 24 de agosto, coincidiendo con la festividad de San Bartolomé, los visitantes podrán disfrutar de talleres de elaboración de estos sombreros, conciertos, bailes regionales y gastronomía.

No puede faltar un poco de música.

En la Ría da Estrela los festivales están a la orden del día. Nadie se queda fuera. El Rompetiño Jump Festival, del 5 al 7 de julio en Porto do Son, combina a la perfección música urbana con actividades deportivas paralelas a las musicales, como BMX o Skate. Una cita imprescindible para la ‘chavalada’.

Los rockeros de toda la vida no pueden faltar al Castelo Rock, en Muros, que celebra su vigésima edición el 26 y 27 de julio. La acampada es gratuita y durante el evento se desarrollarán actividades paralelas en la calle para disfrute de los asistentes. El ambientazo y buen rollo está más que garantizado, como es costumbre en festivales de este calibre.

Quienes prefieren un ambiente más sosegado, escuchando una música armoniosa y melódica, pero que no huya de sonidos como el jazz, soul o rock, siempre eligen el Noia Arp Fest, del 8 al 10 de agosto. Artista de reconocido prestigio nacional e internacional se dan cita en un evento único, en escenarios de excepción.

Días después, la misma Noia cambia de tercio y se sumerge de lleno en el mundo del jazz. Los más entendidos del género acuden para escuchar algunas de las propuestas más interesantes del panorama jazzístico en una cita pensada para los seguidores y para los neófitos que están empezando a adentrarse en el mundillo. Jazz Noia como plan, no tiene rival…

 

Más información: www.riadaestrela.com

MEJORAS Y NUEVAS EXPERIENCIAS PARA DISFRUTAR DE LA MENORCA MÁS HISTÓRICA

La Torre d’en Galmés y el Fort Marlborough presentan nuevas mejoras de cara a esta temporada gracias a la Fundació de Foment de Turisme.

 

 

Las dos instalaciones introducen cambios con un nuevo audiovisual explicativo para el poblado talayótico y renueva las estructuras para los cañones del recinto. La Fundació Foment del Turisme de Menorca continúa su labor de mejorar la experiencia de los visitantes en las instalaciones y recintos que gestiona. Para ello, y con vistas a esta temporada, ha introducido dos cambios que se encontrarán los visitantes del Centro de Interpretación de Torre d’en Galmés y del Fort Marlborough.

 

 

El Centro de Interpretación de Torre d’en Galmés, se ha actualizado el montaje audiovisual que se proyecta a los visitantes, un corto que comparte vistas aéreas de las diferentes zonas que se visitan y etapas a partir de un cronograma muy visual y con animaciones. Desde la Fundació recomiendan hacer una parada en el Centro de Interpretación previa a la visita al Poblado para disfrutar de este cortometraje animado, el cual cuenta con un importante trabajo de documentación e investigación para ofrecer la máxima rigurosidad transformándolo en un documento de gran valor y atractivo para diferentes públicos que pasan por Torre d’en Galmés.

 

 

Se trata del poblado más grande de Menorca. Está situado sobre un pequeño cerro que se hace más pronunciado hacia el sur, y desde el cual se domina visualmente buena parte de la zona meridional de la isla. En un día claro y despejado, es posible divisar a lo lejos las montañas de la vecina Mallorca. Su posición privilegiada permitía ‘vigilar’ un gran número de poblados talayóticos repartidos en diferentes localizaciones.

 

 

Otra de las mejoras que se han hecho ha sido la actuación en las estructuras de madera que sujetan los cañones en el Fort Marlborough, en la Cala San Esteban. La obra, a cargo del maestro arader, Ovidi Pons Triay, se ha realizado a partir de los planos usados en la musealización inicial a principios del siglo XX, habiendo trabajado ya el propio artesano en el proyecto inicial con el maestro arader Pedro Pons.

 

 

Vigilando desde la cala de San Esteve, El Fort Marlborough fue una base construida por el ejército británico entre 1720 y 1726. Junto con el castillo de San Felipe y la torre de Stuart o d’en Penjat servía para proteger la entrada del puerto de Mahón, uno de los más deseados en el Mediterráneo occidental por las potencias de la época. Es de obligado visionado  el montaje expositivo que, apoyado en la tecnología, sitúa al visitante en la época de los asedios del Fuerte de Marlborough y explica la historia tanto de Menorca como de Europa a lo largo del convulso siglo XVIII.

 

 

Armado con distintas piezas de artillería para contener al enemigo, este fuerte, con un recinto central heptagonal, fue construido a partir de un gran foso con una galería de contraescarpa tallada en la roca. Las vistas desde el recinto superior son de las más retratadas por aquellos amantes de la historia que ven en Menorca un verdadero museo casi inagotable de recursos que visitar, vivir y por los que sorprenderse genuinamente.

 

 

Más información: Menorca.es

 

PARELLA, LA ATLÁNTIDA MENORQUINA QUE ALGUNOS ASEGURAN HABER VISTO

De entre todas las leyendas que envuelven a Menorca en un halo de misticismo y magia, la historia de esta ciudad resuena con fuerza cada vez que se acerca la noche de San Juan

 

Cuenta la leyenda que un brazo de tierra unía las islas de Menorca y Mallorca. Estos terrenos fueron conquistados por fuerzas del diablo y por eso Dios decidió sumergirlos en lo más profundo del mar. Otros cuentan una historia diferente. Dicen que en ese brazo existía una ciudad de tal belleza, que otra ciudad vecina, celosa de su esplendor y prosperidad, la maldijo provocando que se sumergiera en las aguas del canal de Menorca. Hay quienes afirman haberla visto al atardecer en el día de San Juan, e incluso han oído repicar campanas. Se trata de Parella, una ciudad legendaria que engrosa la lista de mitos que envuelven Menorca.

 

 

Lugares de contrastada belleza siempre, o casi siempre están llenos de magia y misterio. Por supuesto Menorca es uno de esos sitios. De entre toda la tradición oral que se ha recopilado acerca de la isla con el paso de los años, hay una historia que resurge con fuerza cada noche de San Juan. Puede que este año, algún afortunado que se encuentre paseando por Ciutadella, opte por buscar un buen mirador al mar y a lo lejos vea por un instante los reflejos de una ciudad imponente que pronto se sumergirá de nuevo Y, si escucha con atención, oirá el repique de las campanas que voltean en los torreones… O tal vez, en una noche muy oscura, como han afirmado algunos marineros, y hay fuerte marejada, se pueden ver reflejos rojizos en el agua donde, según cuentan, la ciudad sigue viva.

 

 

Pero como toda ciudad hechizada, Parella también tiene una oportunidad de redención. Se dice que si 7 Juanes se encuentran de casualidad con 7 Juanas a la orilla del mar en el día de San Juan, sucederá el milagro y Parella volverá a resurgir del fondo del mar para brillar como nunca.

 

 

Leyenda o no, lo que no puede pasar por alto es el hecho de que Menorca es un destino que se presta a la magia y al embrujo. Cada día es una oportunidad de hallar un nuevo tesoro, una historia fascinante o un rincón de ensueño. Puede que Parella sea solo fruto de la tradición y las historias que engrandecen aún más el atractivo de esta isla, pero son una excusa más que apetecible para animarse a encontrar nuestra propia ciudad mágica dentro de este último paraíso del Mediterráneo…

 

 

 

 

GORBEIA, EL CORAZÓN VERDE DE EUSKADI

Hay quien desconoce que a tan solo 20 minutos de Bilbao y de Vitoria-Gasteiz se esconde un paraje repleto de rincones únicos. Un lugar donde naturaleza, gastronomía, patrimonio y cultura confluyen brindando al viajero un muestrario de experiencias singulares en las que todo lo que hace maravillosa a una tierra como Euskadi lo tienes a tu alcance para vivirlo en una escapada.

 

Si bien territorialmente está repartido en tierras de Álava y Vizcaya, el Gorbeia es uno y además es único. Este Parque Natural, compartido por dos comarcas: la de Arratia-Nerbioi, en Vizcaya; y la Cuadrilla de Gorbeialdea, en Álava, es un reclamo para los amantes del senderismo y el cicloturismo. Con rutas adaptadas a todos los niveles y necesidades, solo queda preparar bien el calzado, la mochila, o engrasar bien la cadena de la bicicleta para dejarse llevar por un paisaje y un entorno espectacular. Con Gorbeia Bira, Bike Tour, tenemos kilómetros y kilómetros de puro disfrute. Para los amantes de la bici de carretera, puertos como los de Bikotzgane y Dima, además del tránsito por carreteras de baja densidad de tráfico que encontrarán en la zona de Zárate, Manurga y Etxaguen. Para aquellos que se decanten por la bici de montaña, 93 kilómetros para disfrutar de las encantadoras localidades de Murgia, Legutio y Otxandio. También el embalse de Urrúnaga, el Humedal de Saldropo, el bosque de las Burbonas, etc. Incluso podrán visitar el Centro de Interpretación del Parque Natural de Gorbeia en Sarria y el menhir de Kurtzegan. Y como plato fuerte, la cumbre de Gorbeia, una experiencia única que te recompensará con vistas impresionantes y una sensación de logro incomparable.

Caminar por Gorbeia no tiene desperdicio. Rutas cortas, medianas o largas para todo tipo de niveles, pero un denominador común: disfrutar del paisaje, de la historia y de una tierra con tesoros inimitables. Hayedos sacados de un cuento, donde el sonido de la naturaleza crea una bella atmósfera; cascadas vertiginosas como la de Gujuli, que con sus 100 metros de caída asegura una fotografía de valor incalculable; embalses y humedales de gran importancia ecológica y que nada tienen que envidiar a los grandes lagos de las películas; el silencio sobrecogedor de un monasterio centenario, el Santuario de nuestra señora de Oro, la mejor atalaya desde la que dominar el pulmón verde de Euskadi.

No es solo la naturaleza lo que hace de Gorbeia un destino sorprendente. Dentro de este entorno natural hay un patrimonio, una historia de siglos reflejada en cada elemento arquitectónico, en cada casa torre y cada palacio que refleja las disputas y entresijos de las relaciones entre los linajes y las familias nobles que habitaron Gorbeia. Como muestra, unos conjuntos medievales históricos, muchos de ellos declarados “conjunto monumental” por el Gobierno Vasco. Aunque también es posible contemplar la huella que ha dejado el ser humano en sus paisajes con las construcciones para oficios de gran importancia para el entorno rural como los caleros, molinos y canteras.

Lo rural, en Gorbeia es sinónimo de esencia, de raíces, de origen. Oficios como la alfarería vasca tradicional, la apicultura, el pastoreo, la quesería y por su puesto la micología, son actividades que han dotado de identidad a esta tierra. En Gorbeia el viajero no asiste como mero espectador, lo vive. Puede buscar setas acompañado por expertos. Puede crear un katilu con sus propias manos en un taller artesano. Puede enfundarse un mono de apicultor y extraer el mismo la miel de un panal. Puede aprender el oficio de pastor y a relacionarse con los perros que ayudan a desarrollar tan ancestral oficio.

 

Y es por esa esencia rural tan presente en Gorbeia, que su gastronomía tiene un marcado y reconocido carácter y sabor. El caserío, proveedor de sabor con su larga lista de productos, es el hilo conductor de una gastronomía sencilla, humilde, pero a la vez genuina y sabrosa. Productos como el queso, elaborado a partir de la leche de oveja latxa; las sidras, cervezas y el txakoli artesanal; verduras y hortalizas frescas de la huerta; el pan, la leche y los huevos, recolectados a diario a la manera tradicional; o la carne procedente de animales criados en total libertad y de forma ecológica, en armonía con la naturaleza y las costumbres; con la misma ilusión y profesionalidad de siempre. Todos los ingredientes indispensables para conformar una gastronomía reconocible, llena de sabor y de tradición.

Gorbeia, que en torno a un monte con el mismo nombre despliega todo un abanico de experiencias, de vivencias y recuerdos imborrables, es ante todo un territorio en el que sus gentes abren sus brazos para recibir a todos aquellos decididos a dejarse llevar por un enclave de inusitada belleza. El corazón verde de Euskadi late, siente y vive por su gente para que sean los mejores prescriptores del auténtico tesoro que tienen ante sí cada día y lo transmitan a los viajeros que aún no saben lo que les queda por descubrir de esta maravillosa tierra…