Taste of Beauty de la Viña, la esencia de la vendimia en una experiencia única

Experiencias únicas, memorables y dignas de ser contadas. Esto es lo que propone el Wine Oil Spa de Sercotel Villa de Laguardia, un objetivo que consigue con su tratamiento Taste of Beauty de la Viña, ideado para trasladar a todo aquellos que lo disfrutan a la vendimia. Con los sentidos a a flor de piel y un grupo de profesionales que exprimen las propiedades de cada uno de los productos, se consigue una vivencia plena en Rioja Alavesa. El tratamiento comienza con una exfoliación a base de aceite de pepita de uva, hollejo, pepita y uva natural aromatizado con frutos rojos. A continuación, se realiza un masaje a base de maniobras lomi –lomi (masaje hawaiano) con manteca corporal de uva y aceite de pepita de uva. La experienica gourmet se basa en una copa de vino blanco semidulce junto a un Pintxo con mousse de foie, Caviar de vino y Sal de vino. Y todo ello en un tiempo de 50 minutos y un precio de 49 euros.

El Wine Oil Spa de Sercotel Villa de Laguardia promete momentos únicos para sus visitantes. Un lugar donde conseguir relax y bienestar es una tarea más que sencilla, completada por un precioso entorno natural junto a Sercotel Villa de Laguardia. Placer, naturaleza y gastronomía se unen en esta atmósfera, que ahora en septiembre se convierte más que nunca en una tierra vitivinícola.

Islas Columbretes, la joya natural marina de Castellón de la Plana

Misteriosos, sorprendentes, fascinantes, cautivadores… Así son los cuatro conjuntos de islas volcánicas que constituyen la Reserva Natural de las islas Columbretes, uno de los tres espacios naturales que atesora Castellón de la Plana. Desde el Grao se realizan salidas en golondrina o catamarán que navegan por sus alrededores, amarran para visitar la Illa Grossa –única habitada– y permiten dar un chapuzón para practicar snorkel (buceo de superficie). Aunque también hay excursiones para hacer submarinismo y admirar su espectacular fondo marino, declarado Reserva Marina.

    

Entre los atractivos turísticos de Castellón de la Plana –como sus playas, su patrimonio monumental o su rica gastronomía– destacan también sus espacios naturales. Dos de ellos están en tierra firme: el Parque Natural del Desierto de Las Palmas y el Paraje Natural del Ermitorio de la Magdalena, origen de la actual ciudad. Y uno reposa en las plácidas aguas del mar Mediterráneo, sobre fondos de 80 metros de profundidad: La Reserva Natural de las Islas Columbretes.

 

Su nombre deviene de la expresión Colubraria, con la que los primeros navegantes, griegos y latinos, la identificaron en sus cartas de navegación por la abundancia de serpientes que allí encontraron y que prácticamente desaparecieron al incendiar la isla para acabar con ellas. Hasta principios del siglo XIX sus únicos visitantes eran pescadores, contrabandistas o piratas, pero la construcción de un faro, inaugurado en 1860 dio inicio a su ‘colonización’.

Este archipiélago, que precisamente este 2018 cumple tres décadas desde su reconocimiento como Reserva Natural por la Generalitat valenciana, está integrado por cuatro conjuntos de islas de origen volcánico, cada uno de los cuales toma el nombre de la mayor: Illa Grossa, la Ferrara, la Foradada y el Carallot. De todas ellas, solo la primera está habitada y puede visitarse.

 

En forma de media luna que recuerda a la griega Santorini, aunque mucho menor, Illa Grossa está integrada por diversos cráteres encadenados. A su pequeño puerto, Tofiño, llegan las embarcaciones del Grao para que los visitantes puedan acceder por su escalinata y realizan el único camino interpretativo de la isla hasta los 67 metros donde está el faro.

 

Los grandes atractivos de estas islas son de carácter natural: su fauna y su vegetación. Diversas aves marinas –como la gaviota de Audouin, la pardela cenicienta, el halcón de Eleonor o el cormorán moñudo– encuentran en ellas acomodo para sus nidos, mientras las lagartijas corretean por la tierra. Todas estas especies están catalogadas en diferente grado de protección –desde en peligro de extinción como vulnerables o especies endémicas– de ahí la importancia de su protección.

Al margen de la Illa Grossa, sobre la superficie del mar destaca otra de las islas, el Carallot, que con sus 32 metros de altura es fiel testimonio geológico de los restos de la chimenea central de un milenario volcán. Pero el otro gran atractivo de las Columbretes –cuyo parte emergente ocupa 19 hectáreas– es la fascinante Reserva Marina de 5.543 hectáreas que rodea todo el archipiélago. Un mundo subacuático que se puede admirar parcialmente practicando snorkel (buceo de superficie), aunque para conocer mejor sus profundidades lo ideal es el submarinismo. Para ello se deberá contar con autorización del Ministerio competente en Medio Ambiente y Pesca.

 

Al tratarse de una Reserva Natural, máxima figura de conservación, las Columbretes tienen un cupo restringido de visitantes diarios, 78, que deben hacer la visita guiada en grupos de máximo 20 personas. Los horarios de visita a la Illa Grossa son: a las 10.30, 12.00, 13.30, 17.00 y 18.30 horas. El período de 12.00 a 15.00 horas está reservado para golondrinas. Estas visitas deben contratarse en las empresas privadas que las organizan, que son las que disponen de los cupos asignados: 40 para golondrinas, 20 para charters y 18 para particulares.

 

El Centro de Información de la Reserva Natural de las Islas, ubicado en el Planetario del Grao, ofrece más detalles sobre estas visitas además de una exposición sobre las islas y el mundo de la pesca, y diversas campañas educativas relacionadas con las islas. También hay un servicio de audioguía, con la locución de un pescador, una sala de proyecciones donde se ofrecen vídeos y audiovisuales que suponen un excelente preámbulo antes de hacerse a la mar en pos de las Columbretes.

 

Para más información, consultar las siguientes webs: https://www.castellonturismo.com/que-hacer/parques-naturales/islas-columbretes/

 

       http://www.parquesnaturales.gva.es/es/web/pn-illes-columbretes

12 rutas senderistas para disfrutar de la naturaleza en Roses

Iniciada la cuenta atrás para despedir el verano, Roses sigue ofreciendo alicientes para una escapada preotoñal disfrutando de la privilegiada naturaleza que la rodea. La bella localidad de la Costa Brava (Girona), amparada por el Parque Natural del Cap de Creus, ofrece a los amantes del senderismo doce rutas con las que descubrir, de forma activa, sus numerosos encantos. Unas rutas que van desde caminos de ronda que bordean el Mediterráneo por su serpenteante costa hasta itinerarios para descubrir restos megalíticos o visigóticos  

 

     Roses atrae al turismo por el potente imán de sus playas y calas –dieciséis–, le sorprende por sus joyas patrimoniales –como su Ciudadela o el Castillo de la Trinitat– le seduce por su sabrosa gastronomía –en la que reina un guiso de pescadores, el Suquet de Peix– y le mantiene activo con sus rutas senderistas, un docena, para todos los gustos y condición física.

 

Arrancado ya el mes de septiembre, antesala del otoño, cuando el sofocante calor estival empieza a menguar, es un buen momento para coger un bastón, calzarse unas botas… y empezar a caminar. Y esta bella localidad de la Costa Brava (Girona) es el punto de partida perfecto para disfrutar de los muchos encantos naturales que la envuelven.

 

Estas son las doce rutas senderistas que propone el municipio:

 

1 – Camino de ronda–El Faro. Estos caminos se crearon para comunicar las poblaciones costeras y adoptaron el nombre de ‘ronda’ en alusión a las patrullas que vigilaban el contrabando en la zona. Este, en concreto, tiene como referencia el faro situado a la salida de la localidad, consta de 2,4 kilometros y permite empezar a hacernos una idea de la belleza de la Costa Brava.

 

2 – Camino de ronda a Cala Monjoi. Recorre los casi 4 kilómetros que separan la playa de la Almadrava de Cala Montjoi, lugar mundialmente conocido por albergar durante muchos años a El Bulli, el innovador restaurante que Ferran Adrià llevó a la cima de la gastronomía mundial. Cerrado en 2011 tiene previsto reabrir en 2019, transformado en Fundación Bulli 1846. Una ruta que destila paz y sosiego, para descubrir acantilados, rocas escarpadas y calas solitarias.

 

3 – GR92 Cala Monjoi–Cadaqués. Unos 10 kilómetros, entre la cala del Bulli y la fotogénica Cadaqués, que discurren por el Parque Natural del Cap de Creus. Pasa por algunas de las más espectaculares calas del norte de la Costa Brava, como Calitjàs, Pelosa o Jóncols, y el impresionante Cap Norfeu.

 

4 – Paseo de altura por el Cabo de Creus. Itinerario de 4 kilómetros que permite admirar la dureza del paisaje de este Parque Natural desde su zona más alta, pasando entre brotes de estepas y brezos, por antiguos terrenos abancalados y masías abandonadas.

 

5 – Paseo hasta Castrum visigótico. Un trayecto corto –apenas 1,5 kilómetros– pero en subida hasta la cima del Puig Rom, donde se hallan unos de los restos visigóticos más significativos de la península ibérica. Con el aliciente de ser un espectacular mirador natural a Roses y su majestuosa bahía.

6 – Itinerario megalítico de la piedra seca I. Ruta circular de unos 3,8 kilómetros en la que se admiran espacios funerarios prehistóricos y expresiones culturales de época neolítica de las comunidades campesinas establecidas en la zona del pla de la Casa Cremada. A destacar la presencia de construcciones de piedra seca.

 

7 – Itinerario megalítico de la piedra seca II. Complementario del anterior, sus 4,2 kilómetros transcurren por la Casa Cremada ascendiendo hasta la cresta para alcanzar el pla de les Gates y bajar hasta el valle de la Quarentena.

 

8 – Itinerario megalítico y de paisaje III. Consta de 10,5 kilómetros que suponen una vuelta completa por la Vall de Montjoi, con un paisaje agreste y solitario. Bajo la pequeña llanura del valle hasta su cabecera (Puig Alt) se cruza por un paisaje abancalado, lleno de antiguos cultivos y salpicado de alcornoques. Desde la cima se puede disfrutar de excelentes vistas panorámicas.

9 – Puig de l’Àliga. Itinerario de 7,2 kilómetros que parte de la urbanización del Mas Oliva para seguir por el valle de la Alzeda y ascenso a esta cima, de 463 metros. Desde ella puede observarse, al sur, la bahía de Roses, y al norte, la más sencilla del Port de la Selva, protegida por los valles y montañas de la costa del Cap de Creus.

 

10 – Masos o antiguas casas de campesinos. A la sombra del castillo de Bufalaranya, varias masías estructuraron las vertientes solanas de la sierra de Rodes. La ruta, de 2,7 kilómetros, transcurre por Mas d’en Berta, Mas Ponac, Mas Favar (en ruinas), Mas Palou (reconvertido en hotel) y Mas Pairet.

 

11 – Ruta de los Olivares. Itinerario de 3,5 kilómetros que rodea el barrio de Mas Oliva y sigue por la Riera del Ginjolers, en el valle de la Alzeda. Desde su parte más alta puede admirarse el antiguo cultivo del olivo, con vistas a la bahía de Roses, al fondo.

 

12 – Ruta por el Paseo Marítimo. Dejamos para el final el más sencillo y familiar de los itinerarios. 2,5 kilómetros que permiten recorrer a pie o en bicicleta este paseo rosense, entre las desembocaduras del río Gran y el Faro de Roses, admirando la Ciudadela y el Castillo de la Trinitat. Con un poco de suerte, hasta podremos divisar aves marinas tomando el sol en las rocas.

Tarragona, distinguida como ‘Destino Arquitectónico del Año’ por la Luxury Travel Guide

El legado arqueológico de la Tarraco romana, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, le ha valido a Tarragona una nueva distinción: la de ‘Destino Arquitectónico del Año’ en los Premios Europeos 2018 que otorga anualmente la Luxury Travel Guide y que suponen todo un aval de calidad para los amantes del turismo de lujo. La prestigiosa guía ha valorado no solo la arquitectura del Imperio Romano que Tarragona luce con orgullo integrada en la propia ciudad sino también “la civilización a través de las épocas”, que la han convertido en “monumento vivo a la perseverancia de la humanidad”.

 

    El Anfiteatro romano, el Circo romano, el Acueducto, las Murallas, el Foro Provincial, el Teatro romano… Tarragona es un museo al aire libre que cobija 18 siglos de historia, con un legado arqueológico, el de la Tarraco romana, que le valieron en el año 2000 el reconocimiento de Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO. Un patrimonio integrado en la propia actual ciudad que no solo ha conservado en notable estado sino al que le ha dado vida con recreaciones históricas como las de ‘Tarraco Viva’ o ‘Amfiteatrvm’ (novedad de este verano), paralelas a las diarias visitas de tarraconenses y foráneos.

 

Estas joyas arqueológicas no han pasado desapercibidas para la prestigiosa Luxury Travel Guide, que le ha otorgado el reconocimiento a Tarragona de ‘Destino Arquitectónico del Año’ en los Premios Europeos 2018 que convoca anualmente. Unos galardones que son prescriptores de primer nivel para los amantes del turismo de lujo pues reconocen la excelencia de productos, servicios y destinos turísticos. Ello se realiza a partir del trabajo de un equipo profesional que recorre los destinos de todo el mundo para identificar los mejores hoteles, aerolíneas, operadores turísticos… Previamente a Tarragona ciudad, la agencia local de guías turísticos Argos Tarragona ya había obtenido uno de los preciados galardones de esta publicación.

Para tomar esta decisión, la Luxury Travel Guide ha valorado que Tarragona representa “no solo la arquitectura del Imperio Romano, sino la civilización a través de las épocas”, que la han convertido en un “monumento vivo de la perseverancia de la humanidad”.

 

La Teniente de Alcalde de Turismo y Estrategias de la ciudad, Inma Rodríguez, ha valorado el galardón como “una oportunidad de abrirnos a nuevos mercados, como es el sector del turismo de lujo, y de posicionar la ciudad en los niveles de calidad y de prestigio que buscamos como destino turístico”.

Xàtiva, un destino especial para este otoño

Largos paseos sobre mantos de hojas marchitas. Vuelven a la tierra, en forma de lluvia marrón y amarilla, aquellas que crecieron en verano. Es el otoño una estación de melancolía, de inquietud entre la manga corta y la bufanda. Un momento perfecto para recordar el pasado, para caminar sobre siglos de historia, observando lo que fue para entender lo que es.

Es Xàtiva la ciudad ideal para embriagarse de cultura y de saber; y disfrutar, así, de un otoño diferente, igual de romántico pero con toques de conocimiento. Esta ciudad valenciana es un lugar con un encanto especial. Pasear por sus calles es encontrarse con una mezcla del pasado y del presente, observando vestigios visigodos, musulmanes o cristianos que datan desde antes de la llegada de los romanos, pasando por la Edad Media hasta nuestros días. Es tal su contraste de épocas que en 1982 su núcleo histórico fue declarado Conjunto Histórico-Artístico.

La ciudad fue la más importante del Reino de Valencia, con un innegable atractivo natural que, en palabras de Jaume I, la convertían en “la más hermosa huerta que jamás en villa ni castillo alguno hubiésemos visto”. Pasear por el entorno natural de Xàtiva es disfrutar de una belleza serena e insólita que satisface los anhelos de cualquier visitante. En las inmediaciones de la localidad valenciana se encuentra la Cova Negra, nombrada Paraje Natural Municipal en 2006. Situado en el estrecho valle que recorre el Río Albaida, sus 57 hectáreas revelan un espacio de alto valor ecológico y patrimonial.

Es conocida, además, como ‘la ciudad de las mil fuentes’, debido a los más de 900 caños que se reparten por sus calles y plazas. Reales y monumentales, vecinales y particulares, algunas de las fuentes que en su día proporcionaron fama a la localidad son hoy las protagonistas de una particular ruta que invita a descubrir los rincones más especiales del casco urbano.

Patrimonialmente es tan importante porque fue sede episcopal de la época visigoda y, más tarde, pasó a ser el lugar de residencia de los Borja, la familia que dio a los únicos dos Papas españoles hasta la fecha. En la ciudad se puede disfrutar de monumentos como el Castell de Xàtiva, castillo que se encuentra dividido en dos (Castell menor y Castell major) con restos que datan de tiempos de los íberos y romanos hasta la Edad Media; de la Colegiata, un templo que tardó en construirse 400 años y donde se encuentra una de las colecciones más importantes de Arte Sacro; o la Plaça de la Trinitat, en cuyo centro se encuentra una fuente gótica.

Además de la oferta patrimonial de Xàtiva, durante el otoño se puede disfrutar de la programación cultural de su Gran Teatre. El 11 de octubre llega a la ciudad ‘El lago de los cisnes’, una obra del Ballet Nacional Ruso creada por Piotr Ilich Tchaikosky y estrenada en el Teatro Bolshói en 1877. Se trata de una fábula romántica que ha pasado a los anales de historia de la danza universal. Aclamada en todo el mundo, en sus cuatro actos se entremezclan el amor, la magia y las delicadas partituras del compositor ruso.

La actividad del Gran Teatre se completa con las propuestas de las sociedades musicales, con galas solidarias o con más espectáculos teatrales de diversa índole. Todas las actividades de la agenda cultural se pueden visitar en su web, www.granteatre.com.

MÁS DE 36.000 PERSONAS YA HAN VISITADO EL PÓRTICO DE LA GLORIA

La recién restaurada obra de la Catedral de Santiago de Compostela ha sido uno de los principales reclamos de la ciudad durante este verano

El pasado 2 de julio se inauguraba el Pórtico de la Gloria de la Catedral de Santiago de Compostela. Tras diez años y más de 50.000 horas de trabajo por parte de los equipos de restauración, esta joya del Románico presentaba su magnífica policromía original al público en general a finales de dicho mes. Desde entonces, más de 36.000 personas han contemplado todo el esplendor de esta obra de arte que podrá ser admirada hasta el próximo 18 de septiembre, momento en el que se limitarán los accesos para realizar las labores de encapsulado y serán retomados en noviembre. Para todos los que deseen seguir disfrutando de esta increíble muestra de la imaginería religiosa, el Hotel Carrís Casa de la Troya se erige como la mejor opción de alojamiento.

Santiago de Compostela cuenta desde este verano con un motivo más para ser visitado. El magnífico Pórtico de la Gloria de su Catedral se inauguraba el pasado 2 de julio tras concluir los trabajos de restauración después de 10 años, 50.000 horas de trabajo y una inversión de más de 6 millones de euros para recuperar su policromado original. El 27 de julio abría sus puertas al público en general y, desde entonces, más de 36.000 personas han podido contemplar esta fantástica joya del Románico europeo obra del Maestro Mateo.

 

 

Las visitas se limitarán el próximo 19 de septiembre para realizar las labores de encapsulado y volverán a estar abiertas en noviembre; momento en el que se podrá volver a disfrutar de esta obra de arte de la imaginería religiosa en todo su esplendor. De este modo, los viajeros que no puedan visitar Santiago de Compostela en los próximos días, tendrán un motivo más para hacerlo desde noviembre en adelante. Durante esos meses, el encanto de la ciudad compostelana, patente en su casco histórico, su Mercado de Abastos o sus muchos museos, se ve complementado por una menor masificación turística y una sinigual belleza creada por el ambiente de sus calles y plazas plagadas de historia.

Para todos los que se animen a visitar Santiago, el alojamiento es un factor muy importante, siendo fundamental contar con un establecimiento bien ubicado para poder acceder de forma cómoda a todos los encantos de la ciudad. En ese sentido, el Hotel Carrís Casa de la Troya se configura como la mejor opción. Se trata de un hotel boutique, ubicado en el propio edificio histórico protagonista de la novela homónima de Alejandro Pérez Lugín, que ha sido rehabilitado respetando su estructura original; se sitúa en los metros finales del Camino de Santiago, ya que se accede a la recepción por la Rúa da Acibechería -lugar por donde transcurre el propio Camino- y a escasa distancia de la Catedral, la cual puede ser admirada desde algunas de sus habitaciones.

Esta joya de Carrís Hoteles ofrece un cuidado diseño en perfecta armonía con el estilo de las construcciones tradicionales gallegas, dando lugar a un coqueto establecimiento plagado de encanto, donde las más modernas comodidades se conjugan a la perfección con una decoración que evoca historia y leyendas atesoradas en sus muros de piedra.

 

 

Cuenta con 23 habitaciones, completamente equipadas con aire acondicionado, calefacción, televisión de pantalla plana, minibar y caja fuerte, perfectas para descasar tras el intenso recorrido por la ciudad y para admirar los encantos de la Catedral compostelana, pues algunas de sus estancias ofrecen increíbles vistas del templo. Y una vez recuperadas fuerzas con el merecido descanso, el cliente puede continuar mimándose con el cuidado desayuno que ofrece el Hotel Carrís Casa de la Troya.

Su estratégica ubicación y el exquisito trato recibido son algunos de los aspectos más valorados por los huéspedes. Este reconocimiento se plasma en la valoración de los usuarios de TripAdvisor, con una nota media de 4,5 puntos sobre 5. El hotel es uno de los mejores valorados de Santiago de Compostela, renovando año tras año su Certificado de Excelencia.

 

 

Para reservar habitación en el Hotel Carrís Casa de la Troya la mejor forma es desde la web de la cadena, www.carrishoteles.com. Esto supone importantes ventajas como minibar gratuito durante toda la estancia y el mejor precio garantizado, pudiendo acceder también a paquetes promocionales, descuentos y otros valores añadidos, como early check in y late check out gratuitos bajo disponibilidad.